BEBÉ A BORDO.
VIAJAR SEGUIRÁ SIENDO UN PLACER
Se acercan las vacaciones y quien
más y quien menos ya tiene decidido su destino para pasar unos días de relax y
desconexión. Si tu plan es en familia y viajas en avión, te interesará saber qué
facilidades ofrecen las compañías aéreas para viajar con bebés. ¡Haz del
trayecto parte de tu viaje!
Confort
en las alturas
Viajar en avión es una de las
opciones más cómodas, tanto para los niños como para los papás. Dependiendo de
la compañía con la que viajes, si es regular o de bajo coste, tendrás un
tratamiento diferente, sobre todo en lo que se refiere a equipaje facturado y
al precio del billete de tu bebé. En España los niños son considerados “bebés”
hasta los dos años y pueden viajar sin necesidad de usar asiento, lo que te
resultará mucho más económico. ¡Aprovecha esta época para programar escapadas! En
Iberia, por ejemplo, los menores de dos años pagan el 10% del billete y en
Ryanair establecen un precio fijo de 20 euros por bebé. Es aconsejable que el
bebé viaje con su DNI o Pasaporte. En algunas compañías no es obligatorio en
los trayectos dentro de España, pero la mayoría, sobre todo las de bajo coste,
ya lo reclaman. Para evitar inconvenientes de última hora llévalo siempre
contigo, al igual que el Libro de Familia.
Los
dilemas del equipaje
¿No sabes qué meter en la maleta
de tu bebé? ¿Hará frío o calor? ¿Podré lavarle la ropa? ¿Me llevo su toalla? ¿Y
su mantita? Si la posibilidad de no escoger bien la ropa de tu bebé te
atormenta, elige viajar con una compañía “tradicional”. Puedes llevar hasta 23 kg por niño menor de dos
años, sin coste alguno. Si viajas con bajo coste, has de saber que no permiten
equipaje para los bebés (a no ser que lo factures).
Una de las ventajas de viajar con niños en avión es que puede permanecer en el carrito hasta la misma puerta de embarque. ¡Se acabaron las esperas y las largas colas con él en brazos! A la hora de embarcar deberás coger a tu bebé y la tripulación guardará su carrito, bien en la cabina del avión (si hay espacio) o en la bodega. Al llegar a tu destino te lo entregarán de nuevo a pie de pista, al bajar del avión, o en la salida de pasajeros. Otra opción es facturarlo: en ese caso tendrás que recogerlo en la cinta transportadora, junto al resto de maletas. ¡Pero ojo! Si tu carrito excede las medidas estándar tendrás que buscarlo en la zona habilitada en el aeropuerto para equipaje “extra”.
¡Despegamos!
Ya dentro del avión, el bebé irá
sentado encima de ti, asegurado con una extensión de tu propio cinturón de
seguridad. Pero si tienes planeado realizar un viaje intercontinental y tu bebé
tiene menos de 8 meses, puedes solicitar una cuna. Tanto tú como tu pequeño
ganaréis en comodidad y en descanso. Llama varios días antes a tu compañía
aérea para asegurarte la disponibilidad.
Al viajar con bebés se permite
pasar tanto a la zona de embarque como al avión su comida y su bebida (potitos,
purés, zumos, biberones, agua…). Además, muchas compañías ofrecen juegos y
entretenimientos para los más pequeños que harán su viaje más confortable y
divertido.
Además recuerda:
-
Llevar
siempre algo de abrigo. La temperatura de los aviones es un
misterio. Nunca sabes si vas a pasar frío o calor. Asegúrate de coger alguna
chaqueta o mantita para tapar a tu pequeño. Así evitarás que se constipe o que
le suba la fiebre al llegar debido a los cambios bruscos de temperatura.
-
Vigilar su
hidratación.
El uso continuado del aire acondicionado y la calefacción en el interior de los
aviones no son nada recomendables para tu bebé. Hidrátale continuamente
ofreciéndole agua o el pecho si es lactante para evitar que se le resequen la
garganta y las fosas nasales. También puedes llevar encima un poco de crema
hidratante y aplicársela de vez en cuando si notas que tiene la piel tirante.
-
Dolor en
los oídos.
Uno de los mejores aliados para acostumbrarse a la presurización de la cabina o
evitar el taponamiento de los oídos de tu bebé es el chupete. En el momento del
despegue y del aterrizaje pónselo o aprovecha para darle de mamar ya que el
movimiento de succión rebaja la sensación de presión.
-
Coger su peluche
o juguete favorito.
Para hacerle más corto el viaje o simplemente para que pueda dormir abrazado a
él.